viernes, 16 de octubre de 2009

La banda ancha "es un derecho humano"

Si queremos ver los países más evolucionados del mundo, tenemos que mirar al norte de Europa. Por varias razones culturales, económicas, políticas, de organización social. Y también de legislación. Finlandia, el país de los celulares y la gran revolución económica de los últimos 20 años, muestra una vez más el camino.


BBC Mundo
Finlandia se convirtió en el primer país que eleva al nivel de derecho fundamental el acceso a internet de alta calidad.
Esta semana el Ministerio de Transporte y Comunicaciones anunció que cada finlandés tendrá, a partir del 1 de julio de 2010, derecho a una conexión de banda ancha de un megabyte por segundo.

“Los operadores de telecomunicaciones deben suministrar a cada residencia y oficina una conexión a internet de alta calidad, de al menos 1 megabyte, y a un precio razonable”, según un comunicado del gobierno finlandés.
El gobierno del país nórdico ya había dicho que, de cara a 2015, cada ciudadano deberá tener acceso a una conexión de 100 megabytes por segundo.
Pese a que algunos países, como Francia, ya le han dado el estatus de derecho básico al acceso a internet, Finlandia es pionera en incluir un factor: la rapidez de la conexión.
Para muchos analistas, la medida sienta las bases para que otras naciones legislen sobre el acceso de sus ciudadanos a la banda ancha.
Ciudadanos de la era digital
Se puede estar en desventaja (social) por la información que se tiene y por la calidad de servicios a los que se accede
Javier Díaz, Universidad Nacional de La Plata
Los expertos explican que es evidente la razón por la cual el derecho a una conexión de internet veloz se está convirtiendo en un derecho básico: para millones de personas internet es una herramienta fundamental en sus trabajos y estudios y para otros millones, es el centro de su vida social.
“Internet es sinónimo de información y las posibilidades de ser un ciudadano pleno están muy asociadas con que la gente sepa usar internet”, le dijo a BBC Mundo, Javier Díaz, vicedecano de la Facultad de Informática y Computación de la Universidad Nacional de La Plata.
“Se puede estar en desventaja por la información que se tiene y por la calidad de servicios a los que se accede. Por internet puedes hablar, conseguir trabajo, comprar productos a menores precios”, señaló Díaz.
Muchas compañías líderes de comunicaciones, como Skype, requieren de la banda ancha para su funcionamiento.
Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión
Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos
Para algunos expertos, el caso finlandés deja en evidencia la profundización de la brecha digital entre los países del llamado Primer Mundo y los países pobres, donde ni siquiera el derecho a la alimentación y al agua potable están garantizados.
“Aquí (en Argentina) siempre hemos tratado de promover el tema de la inclusión social e internet. Creemos que los sectores desfavorecidos deberían poder acceder a internet porque es una forma de nivelar el acceso a la información”, indicó Díaz.
Y, es que de hecho, el derecho a la información está consagrado en el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos:
“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.

miércoles, 14 de octubre de 2009

La genética del altruismo y el egoísmo

Jana Beris BBC Mundo, Jerusalén

¿Te has topado con una persona avara? Bueno, quizás debas disculparla... porque nació así y al parecer nadie le ayudó a cambiar.
¿Tu amigo es generoso y está siempre dispuesto a compartir? El y tú han tenido suerte: su generosidad fue determinada por sus genes y, evidentemente, las influencias ambientales a las que estuvo expuesto al ir creciendo no le modificaron su tendencia natural.
En la Universidad Hebrea están convencidos al respecto. En una investigación realizada recientemente en el Departamento de Psicología se llegó a la conclusión de que existe un gen que influye directamente sobre la generosidad de la gente.
El doctorAriel Knafo, psicólogo participante en la investigación, explicó a BBC Mundo que "la conclusión central a la que llegamos es que hay influencia genética en las diferencias en el comportamiento altruista de la gente, porque hay diferencias en el ADN de la gente, que están relacionadas a las diferencias en su modo de comportarse".
Hay influencia genética en las diferencias en el comportamiento altruista de la gente, porque hay diferencias en el ADN de la gente, que están relacionadas a las diferencias en su modo de comportarse.
Ello se vio en una especie de juego de laboratorio, en cuyo marco los participantes debían decidir si compartir o no con otros una determinada suma de dinero que habían recibido.
El profesor Richard Ebstein, el experto en genética del equipo investigador, explicó que en todos aquellos que mostraron una actitud generosa, el gen llamado "arginine vasopressin receptor IA" aparece de una forma más alargada que en el resto de las personas.
En otra investigación llevada a cabo tiempo atrás por el mismo profesor Ebstein, se halló que niños con autismo tienen el gen mencionado en una forma mucho más corta, lo cual explica la base genética de una actitud cuya característica básica es una alteración en la dinámica de comunicación con la sociedad.
Ambas cosas, en sus distintas expresiones, están relacionadas a una actitud normativa o alterada de comportamiento que los expertos llaman "pro-social".
La base genética
Está claro, pues, que no sólo la forma de la nariz o nuestro color de ojos están determinados al nacer por nuestra genética, sino que ésta influye también en nuestro comportamiento.
Antes se pensaba que el cerebro humano es una tabla rasa y que se podía hacer con el ser humano, a través de la educación, lo que uno quisiera.
Richard Ebstein, experto en genética
Para el profesor Richard Ebstein, ello no tiene nada de sorprendente.
"Antes se pensaba que el cerebro humano es una tabla rasa y que se se podía hacer con el ser humano, a través de la educación, lo que uno quisiera. Pero hoy sabemos que los genes son importantes. En casi todo lo que estudiamos, vemos la influencia de los genes".
El profesor Mario Mikulincer, psicólogo de investigación especializado en Relaciones Humanas y decano de la nueva Escuela de Psicología del Instituto Interdisciplinario Hertzlia, sostiene que se puede hablar en términos absolutos.
"Hoy en día en Psicología, entendemos que cada conducta del ser humano es determinada por dos factores: factores genéticos y factores ambientales que influyen juntos y en forma interactiva en el compartamiento. Lo importante es descubrir el componente genético de cada conducta".
Intervención ambiental
Es importante ya que, en caso de problemas o alteraciones que existan a nivel genético, al conocerlas, es posible intentar cambiarlas para bien.
El doctor Ariel Knafo comenta al respecto que, evidentemente, nadie se molestará en investigar si una persona tiene o no un gen responsable por actitudes de mayor o menor generosidad, pero que en casos de ciertas alteraciones, sí se puede intervenir para cambiar la situación.
El trabajo más arduo de la psicología es encontrar cómo la base genética puede interactuar con el ambiente para crear conductas más apropiadas y proveer a las personas con capacidad para adaptarse, crecer y ser más felices.
Mario Mikulincer, Instituto Interdisciplinario Hertzlia
"Hoy sabemos que parte de los problemas de aprendizaje tienen influencia genética pero eso no quiere decir que no vamos a ayudar a un niño que los tiene, porque es genético. No es que decimos que al ser genético, debe quedar así para siempre", asegura Ariel Knafo.
Esta afirmación parte de la base que el medio ambiente también incide.
El profesor Mario Mikulincer tiene un ejemplo concreto relacionado a la teoría del apego, el relacionamiento íntimo que uno tiene con otra persona.
"Hay una clase de apego que se llama desorganizado, por el que una persona no puede llegar a tener contacto íntimo con otra persona en forma estable. Es una tormenta todo el tiempo", cuenta a modo de introducción Mikulincer.
Y añade: "Hoy se sabe que hay un componente genético que contribuye a eso. Si descubrimos temprano que un niño tiene ese componente genético, si se puede descubrir esa predisposición en los primeros dos o tres meses de vida, educando a la madre cómo tiene que comportarse con este niño, puede llegar a neutralizar la predisposición al apego desorganizado".
"Y ese niño, con un buen tratamiento maternal, puede llegar a tener apegos más normativos y una vida mucho más feliz", agrega.
El desafío tiene dos vertientes, tal cual resume a BBC Mundo el profesor Mikulincer: "Pienso que el trabajo más grande y más arduo de la psicología hoy en día es encontrar cómo la base genética puede interactuar con el ambiente para crear conductas más apropiadas y proveer a las personas con capacidad para adaptarse, crecer y ser más felices".

Australia apuesta a liderar en banda ancha


La globalización puede ser vista como un proceso colectivo de construcción del cerebro global. El proceso puede ser visto claramente porque es exponencial, impulsado por la ley de Moore. La fibra óptica bien puede compararse con los nervios del cerebro global, aunque claro está la siguiente tecnología será inalámbrica y los nervios serán seguramente virtuales.

Pasando de lo teórico a lo práctico, en la foto podemos ver los primeros nervios de fibra óptica siendo instalados. Es que la capacidad de ser parte de los nodos del sistema nervioso global será la clave de la competitividad en este siglo. Los países que lo ven, toman la delantera.


Según un informe de EFE, que publica el diario El Mundo, Australia ha puesto en marcha el mayor diseño de infraestructura de su historia para crear una red de Internet de banda ancha que permita comunicarse entre sí a casi todos los internautas del vasto país.

El proyecto, según sus responsables, es comparable al tendido de la primera línea telegráfica terrestre a finales del siglo XIX, que permitió al continente austral comunicarse con el resto del mundo.

La iniciativa tiene como objetivo que el 90% de los hogares de Australia -con una superficie de 7,7 millones de kilómetros cuadrados y situada a una enorme distancia del resto del mundo desarrollado- goce de acceso a Internet a través de cable de fibra óptica antes de 2017.

El 10% restante, localizado en zonas remotas y a menudo en pleno desierto, se tendrá que conectar a la red con la modalidad inalámbrica.

Para lograr su meta, el Gobierno de Camberra invertirá unos 37.000 millones de dólares (25.287 millones de euros) e instalará la conexión en más de diez millones de edificios.

Las máquinas excavadoras especializadas, importadas de Francia, empezaron los trabajos la semana pasada en la isla de Tasmania, la región más septentrional de Australia.

100 megabytes por segundo
Esa zona en 2014 se convertirá en el punto mejor comunicado del planeta con una velocidad de transmisión de datos por Internet de 100 megabytes por segundo, cien veces superior al servicio más rápido que ofrecen ahora los proveedores locales.

"La Red Nacional de Banda Ancha será el mayor proyecto de infraestructura nacional de la historia de Australia", declaró al inaugurar las obras en Tasmania el ministro de Banda Ancha, Comunicaciones y Economía Digital australiano, Stephen Conroy.

Además, las autoridades de la isla australiana han arrancado otro proyecto paralelo en el Hospital General de Launceston, que permitirá a una mujer de 80 años recibir los cuidados que necesite vía Internet a través de una pantalla de televisión, sin tener que salir de su casa.

La inversión en Australia, donde el acceso a la red es uno de los más lentos del mundo desarrollado, revolucionará el sector de las comunicaciones nacionales, como hace un siglo y medio lo hizo la línea telegráfica terrestre.

Un poco de historia
En 1817, la noticia de la muerte en el Reino Unido de la Princesa de Gales tardó cinco meses en conocerse en Australia.

Más de 40 años después, las ciudades de Sídney, Melbourne y Adelaida y la isla de Tasmania estaban conectadas por el telégrafo, pero la conexión entre Australia y el extranjero dependía exclusivamente del transporte por mar y un envío tardaba entre 60 y 80 días.

Cuando la línea telegráfica finalmente se instaló en 1872, el tiempo en enviar un mensaje de Adelaida a Inglaterra se redujo hasta las siete horas.

Para lograrlo, entonces se utilizaron centenares de camellos para tender 2.900 kilómetros de cable y se colocaron 36.000 postes con 11 repetidores, cada uno con dos telegrafistas y cuatro técnicos.

Los trabajadores pasaron hambre y sed, pues en muchos casos carecían de bienes básicos, y tuvieron que soportar las durísimas condiciones climáticas de la árida región central del país y el norte tropical.

Se enfrentaron a hostilidades con los aborígenes, que no se habían acostumbrado aún a la presencia del hombre blanco, y tuvieron que importar postes de metal del Reino Unido al descubrir la capacidad destructora que las hormigas blancas con la madera.

Reto
También el proyecto de la Red de Banda Ancha encontrará dificultades, pero en esta ocasión el Gobierno de Australia asegura que está dispuesto a enfrentarse a cualquier inconveniente, igual que los primeros colonizadores del continente.

Se enviarán satélites al espacio si hace falta, y por supuesto, el erario público sufragará la diferencia de coste de los servicios entregados en las grandes ciudades y en los lugares más remotos del país.

jueves, 1 de octubre de 2009

Gran hallazgo paleontológico: nuevo ancestro

Nuevo ancestro el más antiguo
Por Jean-Louis Santini (AFP) – Octubre 1
WASHINGTON — El hallazgo en los años 90 en Etiopía del esqueleto de homínido más antiguo encontrado hasta ahora, de 4,4 millones de años de antigüedad, arroja luz sobre una nueva etapa en la evolución del hombre que lo acerca al ancestro común de humanos y monos, según un estudio divulgado este jueves.
El rescate entre 1992 y 1994 de este esqueleto fosilizado, pieza por pieza, así como de decenas de otros fósiles pertenecientes a esta misma especie de homínido bautizado 'Ardipithecus ramidus', revela características biológicas hasta entonces desconocidas del primer eslabón en la evolución del hombre desde sus orígenes, según los resultados de los análisis de estos investigadores.
Este fósil de una hembra bautizada 'Ardi' es el esqueleto más antiguo conocido de la rama humana de la familia de los primates que comprende los 'Homo sapiens', así como especies más cercanas al hombre que los chimpancés y los bonobos, subraya el equipo internacional de paleo-antropólogos y de geólogos cuyos estudios aparecen en la revista estadounidense Science del 2 de octubre.
El análisis del cráneo, los dientes, la pelvis, las manos, los pies y otros huesos de 'Ardi' llevaron a los científicos a deducir que en vida se trataba de una hembra bípeda que pesaba 50 kilos y medía 1,20 metros de altura.
El estudio de 'Ardi' permitió una nueva comprensión de la manera por la cual los homínidos -que engloban la familia de los grandes monos, entre los cuales están los humanos, los chimpancés, los gorilas y los orangutanes- podrían todos descender de un ancestro común, precisó Giday WoldeGabriel, del Laboratorio nacional de Los Álamos (Nuevo México, suroeste) que dirigió los estudios de datación geológica del sitio del hallazgo.
Se estima que el último ancestro común a los humanos y los chimpancés podría haber vivido hace unos seis millones de años.
Hasta el descubrimiento de 'Ardi', el eslabón más antiguo conocido de la evolución del hombre era un 'hombre-mono' bípedo dotado de un pequeño cerebro que vivió hace entre uno y cuatro millones de años.
'Lucy', un fósil de un espécimen de esta especie denominada 'Australopithecus' y que data de hace 3,2 millones de años, fue descubierto en 1974, también en Etiopía, a unos 72 kilómetros de donde se encontró a 'Ardi' 20 años más tarde.
'Ardi' era más primitiva que Lucy, indican los análisis comparativos de su esqueleto y de los otros restos fosilizados de 'Ardipithecus', subrayan estos investigadores.
Tras el hallazgo de 'Lucy', los paleo-antropólogos esperaban -al descubrir posteriormente fósiles del homínido más antiguo- encontrar el ancestro común del hombre y el chimpancé, basándose en las tres grandes similitudes genéticas entre ambos.
Pero el esqueleto de 'Ardi' no corrobora esta expectativa, observa Tim White, profesor del Centro de investigación sobre la evolución humana de la Universidad de Berkeley (California, oeste), uno de los principales autores de esta vasta investigación. 'Ardi', al "acercarnos como nunca antes al ancestro común de los monos y el hombre, nos permite realmente imaginar sus rasgos", indicó. "Esta criatura ('Ardi') es de hecho un mosaico interesante, ni chimpancé ni humano", añadió, observando que la mano del fósil es "incluso más primitiva" que la de un chimpancé.
La conclusión "sorprendente" del análisis de las características biológicas y morfológicas de 'Ardi' es que los grandes monos africanos y los humanos siguieron caminos muy diferentes desde su separación, tras su último ancestro común, lo que hace difícil imaginar cómo era éste último y comprender la evolución humana, explicó Tim White. "La única manera de saber a qué se parecía este ancestro será encontrarlo", concluyó, citando a Charles Darwin, que advertía contra las extrapolaciones a partir de los monos.