martes, 28 de abril de 2009

Herbert Spencer

El pensador británico Herbert Spencer,figura clave del positivismo inglés y y primer sociólogo evolucionista, con una polémica relación con Charles Darwin, nació en Derby, Inglaterra, el 27 de abril de 1820, once años después que el naturalista.


Fue educado por un tío, principalmente, en ciencias naturales y matemáticas. No recibió enseñanza universitaria alguna y sólo tuvo como título, de hecho y no de derecho, el de ingeniero civil.


De 1837 a 1846 fue empleado en una compañía de ferrocarriles y durante este período, con 22 años de edad, publicó su primera serie de estudios, titulada "The proper sphere of government".


A partir de 1846 se dedicó al periodismo y a escribir sus reflexiones filosóficas. Un par de años depués fue incorporado como secretario a la redacción de la revista "The Economist", donde permaneció cinco años. De esa época es su obra "Social Statics" (1850).En 1848 asumió la dirección de "The Economist", a la que se considera órgano del liberalismo radical de la época.


Spencer fue el fundador de la filosofía evolucionista en Gran Bretaña y debido a su formación autodidacta se interesó tanto por la ciencia como por las letras.


Como sociológico, fue el primer autor que utilizó de forma sistemática los conceptos de estructura y función, y concibió la sociología como un instrumento dinámico al servicio de la reforma social.


Dedicó su vida a elaborar su sistema de filosofía evolucionista, en la que considera al proceso natural como clave de toda la realidad, a partir de cuya ley mecánico-materialista cabe explicar cualquier nivel progresivo: la materia, lo biológico, lo psíquico, lo social y lo filosófico, entre otros conceptos.


En sus lecturas conoció la teoría de la evolución expuesta a finales del siglo XVIII por el naturalista francés Jean Lamarck. Su teoría, hoy desacreditada, sostenía que los rasgos adquiridos de un organismo eran hereditarios. Sin embargo, puede considerarse que la evolución social es -en cierta forma- lamarckista ya que en ella el aprendizaje es clave y puede transmitirse de generación en generación.


Su doctrina quedó expuesta principalmente en su Sistema de Filosofía Sintética (11 volúmenes), y de su extensa bibliografía destacan "La estática social", "Principios de psicología", "Primeros principios", "Principios de biología", "La clasificación de las ciencias", "La sociología descriptiva", "Principios de sociología" y "El individuo contra el Estado".


Su ambicioso intento de sistematizar todo el conocimiento dentro del marco de la ciencia moderna y especialmente en términos de la evolución, le ha hecho merecedor de figurar entre los principales pensadores de finales del siglo XIX.


La sociedad perfecta ideada por Spencer es una comunidad que ha conseguido el equilibrio entre el organismo individual (el hombre) y el medio que le rodea.


El Estado era para él un mal necesario; ejerció una función importante en las comunidades primarias y militares, que representan una etapa primitiva en la evolución social, pero en una sociedad industrial, que representa el estadio superior de dicho desarrollo, no debe poner trabas a la libertad humana.


Así, frente a todas las formas de legislación social sostiene que toda actividad humana debe gozar de libre juego. La industria, la religión y la educación no deben admitir el control del Estado, que debe cuidar, a lo sumo, que la libertad de uno no afecte la de otro.


Herbert Spencer, quien precedió en algunos de sus libros importantes en unos seis años a Charles Darwin, ya había hecho estudios evolucionistas, dejando en su escritorio datos muy importantes para lo que después vino a ser la doctrina de la selección natural y la supervivencia de los más aptos y adaptados. Murió en Brighton, Inglaterra, el 8 de diciembre de 1903.

1 comentario:

Pedro dijo...

No está mal el artículo, pero Spencer no era positivista.